Hoy vamos a hablar de una fotografía que no es de boda, pero que suele venir después de una boda, jeje... el nacimiento de un hijo.
Cuando nace un hijo toda vuestra vida se transforma, todo pasa a ser relativo y el bebé se convierte en el centro de vuestro universo, de vuestra vida... es por eso que dedicamos una entrada de este blog a este tipo de fotografía que guardará para siempre unos instantes tan importantes para vosotros:
Son sus primeros minutos, sus primeras horas, sus primeros días, son instantes de máxima ternura y pasan tan rápido que todos querríamos congelar ese instante. Captaremos estos momentos mientras duerma relajadamente. Son instantes irrepetibles, experiencias llenas de emociones que convierten este tipo de sesiones en un recuerdo impagable e inolvidable.
Cuando se hace la sesión? El mejor momento para fotografiar a un recién nacido es entre 1 y 15 días de vida, después de los 15 días su acomodación es algo más complicada debido a que abandona su posición fetal. También podemos hacer las sesiones pasados los 15 días pero por todo lo dicho anteriormente las sesiones no son tan productivas pero si ya habéis pasado la fecha os realizaremos igualmente unas fotos inolvidables.
Que incluimos en la sesión? La sesión incluye nuestro tiempo y dedicación, todo el atrezzo necesario para las fotografías, la edición y retoque de las mismas, y lo mejor de todo... os las entrego TODAS!!! No hay un número exacto pero os garantizo que como yo no soy nadie para elegir las mejores fotos, os las daré todas sin ningún cargo extra.
Y para que os vayais haciendo una idea os dejamos aquí algunas fotos de nuestros jóvenes angelitos.